Los guardias de seguridad en las escuelas son muy importantes. Pueden ayudar a controlar las multitudes, vigilar la posible violencia y ayudar en situaciones de emergencia como incendios o terremotos. También pueden recibir formación en primeros auxilios para poder ofrecer atención médica cuando sea necesario.

La presencia de los guardias de seguridad son elemento disuasorio de la violencia y los robos.

La presencia de un guardia de seguridad suele ser suficiente para evitar la delincuencia, pero hay otras formas en las que un guardia de seguridad puede evitar que se produzcan comportamientos violentos. Por ejemplo, puede ayudar a controlar las multitudes en los eventos en los que puede haber potencial de violencia o robo. También actúan como un sistema de alerta temprana si ven a alguien actuando de forma sospechosa, como merodeando en una zona a la que no pertenece o intentando robar cosas a otros. Si un sospechoso actúa de forma sospechosa, es probable que el guardia de seguridad intervenga antes de que ocurra nada. Incluso pueden detenerlo hasta que la policía llegue al lugar, lo que da a los agentes más tiempo para responder antes de que ocurra algo malo.

Pueden ayudar a controlar las multitudes y en casos de emergencia.

Los guardias de seguridad están capacitados para manejar el tráfico de un lote escolar, lo que significa que les será más fácil evitar que los estudiantes bloqueen las puertas y los pasillos, facilitar las salidas de emergencia y evitar que los estudiantes se congreguen en sitios peligrosos como las escaleras o los pasillos. También:

  • Pueden ayudar en caso de emergencia, como un incendio.
  • Los guardias de seguridad están capacitados para manejar emergencias y saben cómo evacuar a los estudiantes de forma rápida y segura.
  • Pueden ayudar con los extintores y los primeros auxilios.

Los guardias de seguridad también pueden ayudar a prevenir el acoso escolar.

La presencia de guardias de seguridad en las escuelas puede ayudar a prevenir el acoso escolar, manteniendo a los estudiantes seguros, así como asegurándose de que se cumplen las normas escolares.

Puede hacer que los niños se sientan más seguros, especialmente los que han sido acosados o han sido testigos de acoso. Si un niño se siente amenazado -directa o indirectamente- el guardia puede intervenir antes de que un altercado se convierta en algo peor. Además, los vigilantes pueden ayudar a informar a la administración escolar de cualquier incidente de acoso para que los profesores puedan intervenir adecuadamente.

En resumen, los guardias de seguridad no son solo un control del tráfico. Pueden ser la parte más importante del plan de seguridad de su escuela.

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